Todo lo que se pueda decir de este reloj a la vista está. Quizá es uno (si no el más) adecuado para la cocina: el reloj en sí es una lata y el péndulo es un batidor. Además, está hecho con material reciclado.
Y todos sabemos lo que eso significa: que en el caso de que haga falta batir unas claras y no tengamos con qué sólo hará falta descolgar el péndulo del reloj y comenzar a trabajar.
Lo único malo que le veo es que las horas van a ser difíciles de leer: como se puede observar no hay números que indiquen hora y minutos. De acuerdo: hay que tener muy mal la vista para no darse cuenta de que el de la foto marca las diez y diez; pero ya puesto y aprovechando la temática del cacharro, ¿no hubiera estado bien haber puesto las horas con sopa de letras, por ejemplo?
Bueno, ahora que lo pienso sí que se podría hacer: más que nada porque saldría mucho más barato hacerse uno con los cacharros de cocina que la abuela no utiliza que pagar por una lata y un batidor pegados.
Visto en Shiny Shiny
La verdad es que no está mal, pero imaginaros que llevamos esto a otras habitaciones.
Un cesto con ropa sucia y un calcetín en cada aguja para la sala con la lavadora y la secadora. Seria una grandiosa idea. O por que nó uno con playmobil y esas cosas.
Quizá descuartice mi despertador y me cree uno personalizado con planos, escalimetros y toas esas cosas.
Me parece muy ingenioso, y pues esta relativamente bonito, seguramente despertaria envidias si ven uno de estos en la cocina y dices que es lo ultimo en moda hogareña 🙂
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Este reloj es una verdadera lata 😉
Pues mi papá había hecho uno con la Sopa Knorr (qué vive en la cocina de la casa de mi tía y está un poco destruido.)
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