La tradición de colocar regalos al pie del árbol de Navidad está bien, pero es un concepto que se puede mejorar con un sencillo movimiento: poner el árbol del revés.
De esta forma conseguimos, automáticamente, disponer de enorme espacio libre para poder ocuparlo con las cajas de los regalos.
Además, las bolas y adornos se puede colocar de forma que queden colgando en el aire. Todo son ventajas salvo el detalle de cómo solucionar el tema de la estrella de Navidad coronando el árbol.
Jodeeer, hasta un árbol navideño invertido.
Qué gran idea para un hogar de homosexuales; dirían los curas y sus gerentes eclesiásticos u obispos
Por cierto, seria una referencia a la muerte de aquel tal s. Pedro, boca abajo
y sin peyorativos, eh…
No hay mal por quién bien no venga, o algo así…
A algunos se les va la olla y no sabes cómo
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