Esta performance se compone de dos partes: una fácil y gratificante; la otra difícil y tediosa.
La parte difícil consiste en componer una reproducción no muy fidedigna de un coche de carreras de Fórmula 1, utilizando cerillas y sin usar ningún tipo de cola o pegamento. Un trabajo complicado pero necesario para el uso y disfrute de la segunda parte.
La segunda parte es donde le proporcionamos una buena dosis de placer a nuestro cerebro reptiliano. Pegarle fuego a la estructura y ver como se carboniza nos gusta. No sabemos porqué, pero nos gusta.
Visto en LaughingSquid