El Trombón de asalto no dispara balas, su objetivo no es acabar (en principio) con la vida del enemigo. Pero sí que es un arma paralizante mucho más amable que los tasers o las pelotas de goma. Es adecuada para acciones de guerrilla (urbana o selvática) y para reprimir manifestaciones en la vía pública.
Es un arma diseñada para atacar directamente a uno de los sentidos más sensibles del ser humano: el oído. Al apretar el gatillo emite desgarradoras ondas sonoras que solo pueden ser evitadas con unos tapones para los oídos o tapándose las orejas con las manos. Lo cierto es que esto último puede ser un problema de cara a su efectividad. Esperemos que en próximas versiones se pueda resolver.
Es obra de CaptainQuinn y su hijo, al que vemos probándolo al grito de «Say hello to my little friend» al más puro estilo Tony Montana.
Visto en LaughingSquid