Los coches han evolucionado mucho más rápido que nosotros, y nuestro cuerpo no está preparado para soportar las fuerzas que un accidente de tráfico puede generar.
Esa es la premisa con la que parte este ejercicio de diseño que viene a imaginar cómo debería ser nuestro cuerpo para poder viajar por carretera minimizando los riesgos de sufrir algún daño.
La escultora Patricia Piccinini es la principal «madre» de Graham, el sujeto que vemos en las imágenes, pero para configurarlo ha trabajado estrechamente con el cirujano y traumatólogo Christian Kenfield y con David Logan, ingeniero especialista en seguridad vial.
El resultado es un ser humano peculiar que se aleja bastante de los arquetipos de belleza actual. Algunos lo calificarán de aberrante pero, a pesar de eso, seguro que la idea atraerá a candidatos dispuestos a sufrir la cirugía necesaria para adquirir el superpoder de ser casi inmune a los accidentes de tráfico.
En esta animación interactiva podemos ver los detalles de las partes más relevantes del nuevo diseño: cráneo, caja torácica, extremidades… todos esos cambios morfológicos tienen su explicación.
Visto en DangerousMinds
Parece que lo tendría bastante dificil para mirar a los lados. Tendrá lesiones menos graves pero a lo mejor tiene mas accidentes…
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