Mi estado de ánimo suele acampar en lo alto de una montaña, al borde del precipicio de la depresión. Pero nunca caigo, y eso que me muevo mucho mientras duermo. El caso es que evito caer en el abismo mediante un sencillo mantra: cada minuto que pasas deprimido es un minuto que podrías usar para masturbarte. Y eso me quita la tontería de un guantazo y me sorprendo con la bragueta bajada, rodeado de una docena de querubines trompetas en mano tocando una armonía triunfal mientras sostienen un cartel que me da ánimos en latín.
Autoblow 2 no está en latín, pero para el caso es lo mismo. Lo que pretende es generar la sensación de felación a pilas, con tres velocidades diferentes y sin el peligro de los molares de por medio, que siempre es un riesgo a correr (en serio, alguien debería poner de moda el uso de las radiografías de la mandíbula antes del acto para trazar un recorrido sin obstáculos).
Todo lo que diga no os va a preparar para lo que Autoblow puede ofrecer, así que es mejor que deje de escribir y os remita al vídeo.
¿Más opciones para momentos íntimos gloriosos? Claro, en QuelovendanX tenemos unas cuantas. Todavía no tenemos a los querubines trompeteros, pero todo se andará.
Visto en Incredible Things
Parece que mola… pero prefiero un esclavo REAL para estos menesteres. Los ruidos guturales de atragantarse, y la percepción de la epiglotis cerrándose alrededor de mi capullo, con el extra de la percepción de pota golpeando a presión mis sacrosantos, no tiene panrangón.
Si no hay arcada, no es mamada.
[…] año pasado fuimos testigos de un importante acontecimiento: el Autoblow 2 despegaba y hacía realidad las felaciones de un solo individuo (siempre y cuando tuviera un […]
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